La historia de una joven indígena que unió dos mundos

No sé tú, pero yo siempre creí que Pocahontas era una invención de Disney. No solo ignoraba que ella había existido en Norteamérica, sino que además había sido una de las figuras más fascinantes de la historia de este continente. Prepárate para conocer la historia de una joven indígena que unió dos mundos.

¿Quién era Pocahontas?

Nacida alrededor de 1595, Pocahontas era hija de Wahunsenacawh, el jefe supremo de la Confederación Powhatan, que gobernaba un grupo de pueblos indígenas que habitaban lo que hoy es Virginia, Estados Unidos. Su nombre real era Amonute, aunque también era conocida como Matoaka. Desde pequeña, se caracterizó por su espíritu curioso y su carácter pacífico.

En 1607, los colonos ingleses llegaron a territorio Powhatan y fundaron el asentamiento Jamestown. Entonces la relación entre estos dos pueblos fue tensa. Se dice que en medio de ese tire y afloje, el capitán John Smith, fue capturado por los Powhatan y estuvo a punto de ser ejecutado, pero gracias a la intervención de Pocahontas el inglés se salvó de la muerte.

Algunos historiadores dudan de la veracidad de esta historia.  Sin embargo, no puede negarse que Pocahontas desempeñó un papel importante en la relación entre los indígenas Powhatan y los colonos ingleses.

En 1613, fue capturada por los británicos con la intención de intercambiarla por ingleses prisioneros de los indios. Durante su cautiverio, la joven india pudo perfeccionar su inglés y fue bautizada con el nombre de Rebecca. Además, John Rolfe, pionero del cultivo de tabaco, y quien había enviudado durante su viaje a América, se enamoró de ella y decidió pedirla en matrimonio.

El cambio de vida de Pocahontas

Pocahontas se casó con John Rolfe y su matrimonio fue asumido como símbolo de paz entre los ingleses y los Powhatan. Durante un tiempo se estabilizaron las relaciones entre ambos pueblos.

De esta unión nació su hijo, Thomas Rolfe, quien más tarde desempeñaría un papel en la historia de la colonia.

En 1616, la pareja y su hijo viajaron a Inglaterra como parte de una campaña para promover la colonización. Pocahontas fue recibida por la corte inglesa y presentada como testimonio del «éxito» de la conversión y civilización de los indígenas. Sin embargo, lejos de su tierra natal, Pocahontas enfermó gravemente. En marzo de 1617, con solo 21 años, falleció en Gravesend, Inglaterra, antes de poder regresar a Virginia.

Su hijo Thomas fue educado en Inglaterra, y volvió a Virginia en 1640. Allí amasó una gran fortuna y fue el iniciador de una de las familias más importantes de Virginia.

Luego de la muerte del padre de Pocahontas el poder de los Powhatan pasó a manos de Opechancanough, quien libró dos guerras contra los ingleses que llevaron ala desaparición casi total de los pueblos indios.

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El legado de Pocahontas

La historia de una joven indígena que unió dos mundos nos deja muchas enseñanzas. Pocahontas navegó buscando la paz y la armonía entre dos culturas opuestas. Además, su historia es el reflejo del impacto del colonialismo y la lucha de los pueblos indígenas por preservar su identidad.

Hoy en día, Pocahontas sigue siendo un símbolo de resiliencia, compasión y unión, valores fundamentales para cualquier camino de bienestar holístico. Su vida sigue siendo contada en artículos, películas y libros.