El tesoro más valioso que posees
Imagina que dentro de ti hay un lugar mágico lleno de flores, plantas y árboles. Cada uno de ellos responde a un valor: seguridad. confianza, amor propio… Ese jardín es el tesoro más valioso que posees y que debes cuidar para que siempre irradie y atraiga luz y color.
Tu autoestima es la manera como ves ese jardín, como lo sientes y cuanto lo valoras. No se trata de ser perfectos ni de compararnos con los demás. Es reconocer que tienes un valor único, simplemente por ser tú. Es reconocer ese jardín dentro de ti y sentir que eres suficiente, eres valiosa, mereces cosas buenas.
Y así como un jardín necesita atención y cuidado permanente, tu autoestima también se protege, se mantiene y se resguarda. Por eso debes revisar cómo está tu autoestima y preguntarte si le estás prestando la atención suficiente.
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Para que nos sirve este jardín
Tener una buena autoestima nos ayuda a enfrentar la vida con más fuerza y alegría. Cuando creemos en nosotros mismos, nos atrevemos a probar cosas nuevas y nos adaptamos más fácilmente a los cambios.
También nos impulsa a decir “no” cuando no queremos algo, y nos permite pedir ayuda cuando la necesitamos. La autoestima es como un escudo que nos protege de las críticas y los miedos, y nos impulsa a cuidar nuestro bienestar.
A lo largo de la vida, muchas cosas pueden influir en cómo nos sentimos con nosotros mismos y por eso debemos estar atentos para evitar que se marchite nuestra autoestima. Por ejemplo:
- Las palabras de otros: A veces, comentarios negativos o burlas pueden hacer que dudemos de nuestro valor.
- Las experiencias difíciles: Fracasos, pérdidas o momentos de tristeza pueden bajar nuestra confianza.
- Las comparaciones: Mirar siempre lo que tienen o hacen los demás puede hacernos sentir menos.
- Las creencias internas: Si pensamos que no somos capaces o que no merecemos cosas buenas, nuestra autoestima se debilita.
Lo importante es saber que, aunque estas cosas nos afecten, también podemos cambiar cómo nos sentimos y pensar diferente.
Cómo saber si te falta autoestima
Puede que te falte autoestima si a menudo te sientes insegura, te comparas mucho, te criticas sin piedad o tienes miedo de expresar lo que sientes. También si evitas probar cosas nuevas por miedo a fracasar o si te cuesta aceptar cumplidos.
Si sientes que tu autoestima está baja, no te preocupes, puedes mejorarla poco a poco:
- Empieza por notar tus pensamientos negativos y cámbialos por otros positivos. Elimina el “no” y el “pero” de tu mente.
- Haz una lista de tus cualidades y logros, pregúntales a las personas que tienes a tu lado por las cualidades que ven en ti. Te sorprenderás de lo que otros ven y tu no habías notado. Anota todo lo que te diga y lee esa lista cuando te sientas triste.
- Busca actividades que te hagan sentir bien contigo misma, como pintar, bailar o escribir.
- Habla con alguien de confianza sobre cómo te sientes; compartir ayuda a cambiar la perspectiva de las situaciones.
- Recuerda que eres única(o) y valiosa(o), y que mereces amor, respeto y felicidad.
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Riega tu jardín todos los días
Cuidar ese jardín interno es importante para mantenerlo florecido. Te dejo algunas ideas para que las pongas en práctica todos los días.
- Habla contigo con cariño: Cuando te mires al espejo, trátate con amor. Dile cosas bonitas a ese ser que se refleja al frente. “Soy inteligente”. “Me gusta mi cuerpo”. “Soy capaz con todo”.
- Celebra tus logros: No importa si son grandes o pequeños, cada paso que das hacia un objetivo es una flor que florece en tu jardín.
- Rodéate de personas que te apoyen: Los amigos y familiares que te quieren son como el sol y la lluvia: nutren tu jardín para que florezca.
- Cuida tu cuerpo y mente: Dormir bien, comer sano y hacer ejercicio también alimentan tu autoestima.
- Permítete equivocarte: Los errores son oportunidades para aprender, no para castigarte.
Recuerda que tu autoestima es el tesoro más valioso que posees. Cuídalo con amor, y verás cómo florece tu mejor versión.