Un delito enquistado en Medellin

La Explotación Sexual Comercial de Niñas Niños y Adolescentes (ESCNNA) es un delito enquistado en Medellín  que desde hace mucho tiempo  ocurre a la vista de todos.

Yo recuerdo que a finales de los 80 y comienzos de los 90, muchas niñas aparecieron muertas en las laderas de Medellín.  Entonces se decía, que los “traquetos” pagaban para que les llevaran niñas (en muchos casos vírgenes) a sus rumbas.  Luego de disfrutarlas ordenaban desaparecerlas (matarlas) para garantizar que no los delataran.

Esas jóvenes eran reclutadas en los barrios populares por los pillos quienes las engañaban con mentiras, les ofrecían dinero o en el peor de los casos, la amenazaban y se las llevaban a la fuerza. Algunas se dejaron seducir y no dimensionaron las consecuencias de entrar en ese círculo macabro. En esa época muchas jóvenes murieron y sus muertes no se esclarecieron.

Cuarenta años después, la ESCNNA se ha diversificado y multiplicado a la vista de todos. Solo necesitas visitar el parque Lleras en Medellín para ver la dimensión que ha tomado este problema.  Ya se nos volvió paisaje ver niñas en las esquinas ofreciendo sus cuerpos, todavía en desarrollo, a cualquier postor.

Quienes vivimos en la Ciudad de la Eterna Primavera no pasamos de lamentarnos, señalar a las víctimas, darle la espalda al problema y seguir nuestro camino. Por su parte las autoridades, se limitan a hacer uno que otro operativo y a acosar a las víctimas.  Poco persiguen a los victimarios.

Vanesa Serpa y Alejandra Ossa son dos jóvenes que viven en la Comuna 1 de Medellín. A ellas, por fortuna les llegaron mejores oportunidades para salir adelante y se salvaron de caer en la ESCNNA. Estudiaron con mucho esfuerzo y encontraron una organización que les dio valor y las empoderó para salir adelante.

Estas jóvenes veinteañeras conocen al dedillo este fenómeno y han asumido el compromiso de alzar su voz para hacerlo cada vez más visible. El año pasado participaron en una investigación que hizo la Mesa Contra la ESCNNA de Medellín, en la que representan a la Corporación ConVivamos.

Las víctimas

De acuerdo con esta investigación la información recogida en las diferentes entidades gubernamentales evidencia la desarticulación que hay entre ellas.  Cada una maneja datos diferentes y no los comparten ni los contrastan.  Sin embargo, todos lascifras son preocupantes. Para el período 2020-2022 la policía reportó la ocurrencia de 714 casos de ESCNNA, la Fiscalía 788 y la Alcaldía 482.

Otro dato importante es  que la mayoría de las víctimas son mujeres. El porcentaje oscila entre el 72% (Sistema de Alertas Tempranas de Medellín) y el 88% (SIVIGILA). Así mismo, se observa que la mayoría de las víctimas son adolescentes (entre 14 y 17 años) y preadolescentes (entre 12 y 13 años).

“Esto hace que podamos identificar la ESCNNA como una violencia de género. Ahí tendríamos que hacer zoom para mirar de forma particular cómo afecta este delito a las niñas y las adolescentes”, refuerza Vanesa.

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Origen de las víctimas

Si bien el fenómeno de la explotación sexual comercial ocurre principalmente en El Poblado, las víctimas llegan de las comunas más pobres de la ciudad. De acuerdo con la investigación de la Mesa contra la ESCNNA, las comunas 8 – Villa Hermosa, 10 – La Candelaria y 1 – Popular, son las de mayor procedencia de víctimas. Ahora bien, según SIVIGILA, las comunas más afectadas son la 7 – Robledo, 3 – Manrique, y 9 – Buenos Aires.

“Las niñas que llegan al parque Lleras, son niñas que se recogen de otros sectores de la ciudad.  Las llevan hasta allá para generar sobre ellas el delito de explotación sexual y comercial.  No son niñas que pertenezcan al Poblado y por eso la administración municipal y los otros entes que tienen que garantizar los derechos de las niñas y los niños, tienen que mirar hacia otros lados, hay que mirar a los barrios populares, hay que mirar a las laderas. ¿Qué valor tienen las niñas y los niños de estos sectores de la ciudad?, enfatiza Vanesa”

Para Alejandra mientras no se ofrezcan otras opciones a los jóvenes para salir adelante será muy difícil acabar la ESCNNA: “la mayoría de las víctimas son empobrecidas, no tienen como garantizar su comida, en su casa son muchos hermanos y no tienen una pieza propia para vivir.  Estas condiciones han provocado que la ESCNNA no solo se mantenga sino que cada vez tenga más fuerza, sobre todo en una ciudad cada vez más cara…”.

Victimarios y detonantes

De acuerdo con la investigación de la Mesa Contra la ESCNNA sólo la Fiscalía y SIVIGILA (Alcaldía de Medellín) incluyen información sobre los presuntos victimarios. En las bases de datos la primera evidencia que 64.3% son hombres y en la segunda, 83.3%.

También se reconocen victimarios cercanos a los hogares de las víctimas, donde tíos, primos y otros parientes demandan ESCNNA, sobre todo cuando se ha iniciado la vida sexual o presentan consumo de sustancias psicoactivas.

“Muchas familias aceptan la ESCNNA al beneficiarse económicamente de esta situación o porque les descarga de las responsabilidades con sus NNA y terminan normalizándola, justificándola y hasta agradeciéndola” (Testimonio tomado de la investigación).

Las niñas, niños y adolescentes que participaron en los talleres de diagnóstico reconocieron que la ESCNNA produce consecuencias negativas para su vida. Sin embargo, mencionan circunstancias que los inducen para ser víctimas: la pobreza, el uso de sustancias psicoactivas, las exigencias de la sociedad de consumo, la falta de reconocimiento de la ESCNNA como un delito, la responsabilización a los menores por estar en la ESCNNA y la disfuncionalidad de las familias.

Judicialización y otros delitos relacionados con la ESCNNA

En cuanto a la relación de la ESCNNA con otros delitos, la investigación presenta los datos reportados por la Policía Nacional entre 2020 y 2022, en orden de mayor frecuencia: pornografía infantil (352 casos), demanda de explotación sexual con menor de edad (175 casos), uso o facilitación de medios de comunicación para ofrecer actividad sexual con menor de edad (73 casos), inducción a la prostitución (63 casos) y proxenetismo con menores de edad (35 casos).

Y frente a la respuesta judicial, según los datos reportados por la fiscalía general de la Nación, entre 2010 y 2022, en Medellín se presentaron 3014 procesos relacionados con la ESCNNA, de los cuales cerca del 90% se encuentran en la etapa de indagación, mientras que menos del 5% se encuentra en ejecución de penas o en juicio.

De estos procesos, en el 10% se presenta imputación de cargos, en el 7,4% se ha dado la captura del indiciado y en menos del 5% se han logrado condenas. Del total de casos donde se ha dado imputación de cargos, en el 70,1% se ha dado una captura y en el 46,2% se ha logrado una condena.

Epílogo

La Mesa Contra la ESCNNA existe hace 12 años y en ella tienen asiento varias organizaciones sociales y las entidades públicas responsables de garantizar los derechos de niñas, niños, adolescentes y jóvenes. Al ver el incremento en las víctimas de este delito queda la sensación de que el trabajo de mesa se ha quedado corto.

“Que la mesa pueda tener planes de acción, pueda tener gente capacitada, profesionales pagados para continuar visibilizando la problemática como lo ha hecho estos 12 años, pero también creando estrategias para su contención. Es un asunto de voluntades políticas, de tiempos, de presupuesto, de coordinación interinstitucional, para que haya unos planes, una pedagogía que explique que los cuerpos de las mujeres, las niñas, los niños y los adolescentes no están en venta…”

Trabajar con padres y madres de familia, vincular a las instituciones educativas, promover el turismo responsable, establecer medidas que no revictimicen y ofrecer oportunidades que le hagan contra peso a la ESCNNA son asuntos que deben tenerse en cuenta para enfrentar la incidencia de este delito en la ciudad.

La tarea no es fácil, pero en ella debemos estar presente como sociedad porque “erradicar la ESCNNA depende de ti, depende de mí, depende de todos y todas”.