El calorcito que brota del corazón de la tierra

Escucha el artículo – Audio producido con IA
Entre las montañas verdes, un cielo cubierto de nubes que van sin prisa, y una piscina natural de agua caliente. Es una delicia, sumergirse mientras el vapor acaricia nuestra cara y las aves nos regalan su canto. Esta escena es posible en Colombia. En sus termales, donde el calorcito brota del corazón de la tierra.
Las aguas termales son fuentes naturales de agua caliente que emergen del suelo gracias a la actividad volcánica subterránea. Al caer, el agua de la lluvia se filtra a través de la tierra, desciende a grandes profundidades y se calienta por contacto con rocas volcánicas. Luego sube cargada de minerales como azufre, calcio, magnesio y sodio, entre otros y brota creando unas maravillosas piscinas de agua caliente.
La sensación de estar allí es como una especie de abrazo cálido y energético que viene desde el centro del planeta.
Únete a nuestro canal en Whatsapp
¿Dónde están los termales más conocidos de Colombia?
Colombia es afortunada. A lo largo de su territorio se esconden auténticos santuarios naturales, muchos de ellos en zonas montañosas y de gran riqueza ecológica. Aquí algunos de los más conocidos:
- Termales de Santa Rosa de Cabal (Risaralda): Rodeados de selva húmeda y con una cascada imponente como telón de fondo. Uno de los favoritos para quienes buscan equilibrio entre naturaleza y confort.
- Termales de San Vicente (Risaralda): Más naturales, íntimos y profundamente conectados con el entorno.
- Termales de Coconuco (Cauca): Ubicados cerca del Parque Nacional Puracé poseen aguas de diferentes temperaturas y una energía muy especial.
- Termales de Paipa (Boyacá): Famosos por sus propiedades terapéuticas. Ideales para relajarte mientras exploras el altiplano cundiboyacense.
- Termales del Nevado del Ruiz (Caldas): Perfectos para quienes buscan aventura, altura y calor… todo al mismo tiempo.
Beneficios físicos, energéticos y emocionales
Los termales no solo relajan. También revitalizan. El agua caliente dilata los poros, mejora la circulación, relaja músculos tensos y ayuda a eliminar toxinas. Pero eso es solo el principio.
Muchas personas experimentan una sensación de equilibrio emocional luego de un baño termal. Como si el cuerpo se deshiciera del estrés y la mente se aquietara al sumergirse en las cálidas aguas. Hay quienes incluso aseguran que los termales tienen un efecto sanador, no solo para el cuerpo físico, sino también para el cuerpo energético.
Y aunque no hay consenso científico absoluto sobre esto último, lo cierto es que salir de un termal es como renacer: te sientes más liviano, más conectado.
Turismo de bienestar: una tendencia que va en aumento
En los últimos años, los termales han ganado terreno dentro del turismo de bienestar en Colombia. Cada vez más personas buscan experiencias que no solo les permitan conocer un lugar, sino también sanar, reconectar y respirar profundo.
Muchos de estos espacios, además, han evolucionado. Algunos conservan su estilo natural, casi silvestre. Otros se han transformado en spas de montaña, con servicios de masajes, alimentación consciente y hasta prácticas de meditación en el agua.
Lee también Peñico: el impactante descubrimiento de una ciudad perdida
Si no has tenido esta experiencia, quizás es el momento de hacerle caso a tu cuerpo. Porque a veces el calor que más sana no viene del sol… sino del calorcito que brota del corazón de la tierra.